Locatarios y comerciantes de los carritos semifijos del Centro Histórico exigieron una solución al ambulantaje desmedido en el primer cuadro de la ciudad.
Los inconformes se manifestaron en el jardín Zenea, con el objetivo de exigir a la autoridad municipal la regulación de los vendedores ambulantes.
Elisa Guadalupe García Morales, una de las comerciantes afectadas, aseguró que las pérdidas generadas por el ambulantaje han sido significativas, especialmente en las temporadas vacacionales.
“Cuando más esperanzado y necesitados estamos de esos flujos de liquidez proveniente del movimiento capitalino y de personas, nos topamos con el perjudicial hecho de que las vialidades han sido nuevamente obstruidas por estos a veces mal llamados ambulantes”.
De acuerdo con la afectada, las fachadas y vías de acceso se ven obstruidas por los vendedores, quienes dijo, no aportan a la economía.
“En ocasiones utilizan el comercio informal para justificar su presencia bajo la consigna de que si el municipio queretano no cede a sus caprichos, más bien de dudosa ética, lo que se está atacando y menospreciando en realidad son sus derechos humanos”.
Por ello exhortó a las autoridades municipales para poner un alto a la proliferación de vendedores ambulantes y a sus líderes, especialmente con motivo de la temporada de Día de Muertos.
